La noticia de que el IPC de EE.UU, un indicador de inflación comúnmente reconocido, ha estado disminuyendo hizo que el mercado de criptomonedas respondiera favorablemente.
L a inflación en la economía estadounidense se desaceleró un poco en julio, ubicándose en un nivel por debajo de las predicciones de los analistas al solidificarse la tesis de que la inflación ha llegado a su punto máximo.
La inflación en los EE. UU. alcanzó un máximo de cuatro décadas en junio antes de enfriarse y aumentar un 1,3 por ciento en julio. El índice de precios de la gasolina disminuyó 7,7 por ciento en julio, lo que contribuyó significativamente a la reducción.
Una disminución de 4,6% en los costos de energía el mes pasado contrarrestó ganancias de 1,1% y 0,5%, respectivamente, en los índices de alimentos y vivienda. Con los costos de alimentos y energía excluidos debido a su alta volatilidad, el IPC subyacente se mantuvo constante en 5,9% durante los últimos 12 meses, por debajo de las previsiones de 6,1%.
Los analistas habían proyectado un aumento de la inflación del 8,7 % interanual y del 0,2 % intermensual, pero los resultados fueron inferiores. Es importante recordar que la inflación promedio todavía está muy cerca de los máximos de 40 años.
Subieron las criptomonedas
La revelación pareció tener un impacto favorable en el mercado de criptomonedas, ya que numerosos valores importantes de monedas digitales aumentaron después de la publicación de la noticia . Después de cerrar justo por debajo de los USD $23 000 el martes por la tarde, Bitcoin (BTC) volvió a subir a más de USD $24 000.
Importantes altcoins imitaron la tendencia al alza, lo que le dio al mercado un tono verde. Según Coingecko, la capitalización de mercado de las criptomonedas aumentó un 3,59% respecto al día anterior.
¿Cómo reaccionará la economía?
El aumento podría ser una señal de la actitud de relajación de los operadores, ya que esperan que la Reserva Federal de EE. UU. (Fed) suavice su enfoque agresivo para endurecer las condiciones monetarias en respuesta a la desaceleración de la inflación.
Este año, la Fed aumentó agresivamente las tasas de interés y endureció la política monetaria en un esfuerzo por frenar la inflación, que todavía está muy por debajo de su objetivo a largo plazo del 2%.
Sin embargo, la recesión económica del país empeora aún más la alta inflación.
Lo más probable es que el ritmo de subida de tipos no se reduzca por el momento, en la medida en que los gastos de vida sigan siendo superiores a los niveles previstos , a pesar de que las cifras de hoy indican que las presiones inflacionistas se están reduciendo ligeramente. Esto podría aliviar la presión sobre la Fed.
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